La fiesta de carácter religioso y con gran arraigo en Aranda de Duero, celebra la aparición del ángel que anunció a la Virgen la Resurrección de Cristo.
El acontecimiento tiene lugar delante del magnífico lienzo arquitectónico que constituye la fachada sur de la Iglesia de Santa María la Real.
A la hora concertada (11:30 de la mañana del Domingo de Resurrección), el estampido de unos cohetes, nos anuncian que por la Puerta del Perdón, es sacada en andas, por los miembros de la Cofradía, la imagen de la Virgen, situándola en un extremo de la Plaza.
La Virgen va cubierta con un manto negro en señal de duelo por la muerte de su Hijo.





Por la Puerta principal de la Iglesia de Santa María sale a su vez, la imagen de
Cristo Resucitado, también en andas, colocándose en el extremo opuesto de la Plaza, frente a la Virgen.
El Cofrade que porta el pendón, inicia una marcha en dirección hacia la imagen
de Cristo Resucitado, realizando tres genuflexiones que representan las tres caídas del señor, que, seguidamente llevan a cabo, también, con la imagen de la Virgen, coincidiendo la tercera genuflexión con el lugar exacto donde esperará la Bajada del Ángel quien la despojará de manto negro.





En estos momentos, cuando el globo sale de la nube y mediante un sistema de poleas es deslizado por un cable hasta ser colocado en la vertical de la imagen. En medio de la expectación de todos, se abre el globo, de cuyo interior emerge el Ángel, quien, tras liberar dos palomas, desciende y se eleva, repetidamente, quitando en uno de sus descensos el manto de la Virgen como señal de alegría. Para, seguidamente descender a tierra situándose bajo las andas de la Virgen, portando en una bandeja el manto negro. El siguiente paso es el Reencuentro de la Virgen con su Hijo Resucitado.





Después de este Reencuentro, se inicia la procesión que recorre las calles de la
Villa, retornando de nuevo a la Parroquia.
La solemnidad con que se realiza este Acto convierte la Pascua de Resurrección en una festividad entrañable para el pueblo arandino e inolvidable para todos aquellos que, sin ser de nuestra villa, se acercan a ella para contemplarlo.
La Bajada del Ángel, tradición fuertemente arraigada entre los arandinos y
atracción turística de la Semana Santa, está organizada por la Cofradía de la
Misericordia o de las Candelas, cuya creación data del siglo XV. La finalidad de esta Cofradía consistía, fundamentalmente, según sus antiguas ordenanzas, en la obligación de asistir a los ajusticiados en su último trance.





El origen de la Bajada del Ángel, no ha sido explicado suficientemente a pesar
de la expectación popular que siempre ha causado. La Bajada del Ángel arandina, está considerada como Fiesta de Interés Turístico Nacional desde hace varias décadas.